Hoy te quiero más que nunca.

Y hoy es el día, lo sé, hoy te quiero más que nunca... me he levantado con muchas ganas de ti, con ganas de abrazarte hasta que no me queden fuerzas ni para respirar, con ganas de que me quieras más que ayer pero menos que mañana. Veo que pasan los días y no me puedo creer todavia que te tenga aquí a mi lado. Cuando tu me tocas y me acaricias siento que los sentimientos se revuelven dentro de mi, siento que jamás podré volver a alcanzar toda esta felicidad que tengo ahora, siento que cada parte de mi cuerpo se extremecé hasta el punto de querer besarte eternamente y tenerte en mis brazos hasta el amanecer... Quiero sentir como las caricias que me regalas día a día son las que me darás siempre.

Eres como el cielo.

- Eres como el cielo.

Yo lo miré con cara de extrañada y antes que pudiera preguntar por qué, él me dio la respuesta:

-  Al igual que el cielo, tienes días en los que estás brillante, lo noto porque traes una sonrisa en la cara y tratas a todo el mundo con amabilidad y simpatía. Pero al igual que el cielo, tienes días apagados, nublados. Se te nota cuando vienes con cara triste, arrastrando los pies como si estuvieras cansada de luchar. Y hay otros días, en los que el cielo estalla en una tormenta, hay otros días en los que estás tan enfadada que prefiero no acercarme a verte. El equivalente a no salir porque te mojarás, ¿sabes? Y por último...

- ¿Y por último qué?

Me miró directo a los ojos y sonrió:

- ¿Sabes de aquellas personas que se tumban en el césped a mirar las nubes? ¿Y que se pueden pasar así horas? Pues lo mismo me ocurre a mí contigo. Podría estar observandote durante horas y no me cansaría nunca.

La felicidad está en los pequeños placeres :)

Y es que, la felicidad no está hecha de grandes o pequeñas cosas, sino de cómo somos capaces de saborear cada momento. Hay momentos que pasan desapercibidos; llegar a la parada y que justo llegue el bus o el momento cuando te aprendes por fin una canción de memoria... Son momentos que pasan desapercibidos y que en lugar de resaltarlos los tomamos como algo cotidiano. Si disfrutas comiendo las galletas por los borde de las esquinas, quitándole el plástico a un CD recién comprado o lamer la tapa del yogur, no desaproveches esa oportunidad. Si somos capaces de transformar la rutina en algo placentero, como ducharse o comer, en todo momento estaremos en un estado positivo. Disfrutar de los pequeños placeres no es cosa de pobres, sino de inteligentes. Ya que, no es sencillo encontrar aquellas cosas que nos hacen felices. Ser felices. Ese es el objetivo. Y para ello, tenemos que encontrar nuestros propios pequeños placeres. Para los que para uno puede ser caminar descalzo por casa, el olor de las sábanas recién lavada, o encontrar pasajes subrayados en un libro prestado, para otros puede ser cualquier cosa, todo sirve. Recordad todo aquello de lo que disfrutábamos de enanos, cuando aún éramos muy inocentes. La felicidad no está hecha de grandes cosas, sino de pequeños placeres.

Aprendemos a escondernos de todo aquello que nos duele. A sonreír sin motivo alguno, a vivir en una mentira. A tener dos caras la que mostramos, la de fuerte y la que ocultamos, la de débiles. Aprendemos a tropezar con la misma piedra mas de una vez, bueno aprendemos… mas bien nos acostumbramos. A apoyarnos en los demás y cuando nos dejan solos, nos perdemos. Acostumbrados a estar con gente falsa que nos acabamos convirtiendo en una de ellas. ¿Pero sabes qué? Es tu vida no la de los demás. Si te caes levántate con o sin ayuda, que si necesitas llorar y no tienes a nadie, fácil, enciérrate en el baño y llora a mas no poder, no te hundas por eso. Haz lo que quieras sin pensar en las consecuencias, salta, canta, ríe, llora, baila, bebe, fuma, enamórate, desenamórate, sufre, haz sufrir. Vamos, abre la puerta de tu casa, sal a la calle y crea tu vida.

Encontrar a alguien parecido a ti :)

Cuando un día te das cuenta de que encuentras a alguien muy parecido a ti, o simplemente que congeniáis, o por el contrario, cuando te das cuenta de que has encontrado a la otra parte de tu vida, son sentimientos muy diferentes.  Y aunque a veces le matarías, otras sin embargo piensas que te falta la vida para darle las gracias. En este caso, hablo de cuando sabes que esa persona que te quiere nunca te va a defraudar y que tú, que le quieres, no te separarás de su lado.

Demuéstramelo :)

Dime por qué al ver tu sonrisa se me ilumina la cara. Dime por qué no soy capaz de aguantar mirarte a los ojos y que me mires a la vez. Mejor dicho, no me digas nada, solo bésame y demuestrame que tú también lo sientes.

¿Y si te digo que sólo con tocarme me llevas hasta el cielo?

Que sólo con tocarme vuelo hasta el quinto cielo. Que si me abrazas se me va el frio en cero coma. Mejor no hablar de cuando me besas, me haces sentirme la mejor persona del mundo. Y no tienes ni pizca de idea de la sensación que me produce el sacarte una sonrisa, por muy pequeña que sea.

Solo hace falta sentirlo (L)

Es inútil intentar que todos lo comprendan, porque nunca fue necesario definir un sentimiento tan pequeño y a la vez tan grande.
Solo hace falta sentirlo.

Prométeme.. :)

Prométeme que mañana me querrás más que hoy, que seré en quien pensarás día y noche, que todos tus te quieros serán solo para mí y que nunca me vas a dejar sola.
Prométeme que no irás por delante o por detrás de mí, si no a mi lado; que solo me besarás ami. Prométeme que cada vez que caiga tú estarás ahí para ayudarme a ponerme en pie; prométeme que nunca olvidarás cada momento que vivamos...
Pero sobre todo, prométeme que cumplirás una a una, todas tus promesas.

Un mensajito a las tantas...

Un mensajito a las tantas, un beso mal dado, una lágrima de felicidad, una barra de labios, una mentira para salir del paso, un corazón mal pintado, un vicio malo, un alma buena, una sonrisa blanca, un I love you mal pronunciado, un adiós que siempre suena igual. Una canción hippie, un invierno frío en la calle y un subidón en el ascensor, un desayuno sin diamantes, un pelo despeinado después de liarla un rato, una mano traviesa, un juego prohibido, un chocolate que no se come, una cuenta atrás, un "hoy a la hora de siempre", un "quedemos", un "me encantó lo de ayer", un "me gustas”, un "me encantas", un "te quiero".